Megan Maxwell: "Las mujeres podemos actualmente escribir lo que se nos da la gana"
Con una legión de lectores y devota de su familia, la escritora española defiende sus libros y toma distancia de su rival E.L. James
Megan Maxwell prefiere hablar de guerreros antes que de fanáticos. Sus lectores son legión y tienen un espíritu de lucha similar al de su autora predilecta, la creadora de la trilogía Pídeme lo que quieras, Adivina quién soy y Adivina quién soy esta noche (Planeta). Nacida en Alemania, hija de un estadounidense y de una española, Maxwell confiesa que innumerables editoriales rechazaron sus ficciones, hasta que un editor la descubrió en un taller al que asistía. "Me decían que las mujeres de mis novelas tenían un carácter demasiado fuerte, y yo me negaba a bajarles el carácter porque a mí me ha criado mi madre. No he tenido la figura del padre presente." Antes de que fuese la escritora que hoy reconocen por las calles de Madrid, durante 22 años Maxwell escribió en la intimidad y el anonimato de su hogar, luego de largas jornadas de trabajo como secretaria en una oficina jurídica, cuando sus hijos dormían.
Ayer, una hora antes de que se presentara en la librería El Ateneo Grand Splendid, una fila zigzagueante de guerreros y de ovaciones se formaba sobre la avenida Santa Fe. "Mi mamá era una gran lectora de novelas románticas. Cuando las terminaba de leer, no entendía por qué las protagonistas se desmayaban o temblaban cuando un hombre las besaba", explica esta mujer felizmente casada desde hace 28 años, madre de dos hijos.
-¿Por qué pensás que tenés tantos seguidores?
-Busco generar empatía, creérmela yo, y que cuando el lector la lea piense que le está pasando a él. Quiero que cuando lean una escena de sexo se exciten. Siempre digo que no quería ser escritora. A mí me gusta vivir vidas paralelas, crear y manejar vidas.
-¿Te molesta el término chic lit [literatura para chicas]?
-Escribo novela romántica y dentro de ella hay subgéneros como el chic lit, lo medieval, lo erótico, el time travel. Lo que no me gusta nada es "porno para mamás". Lo erótico no es porno.
-Debés recibir comentarios despectivos hacia el género que cultivás.
-Me molesta cuando dicen que las escritoras de novelas románticas no son escritoras, que son autoras de novelitas rosas. Para mí, 300 páginas de un thriller con crímenes y una romántica de igual tamaño tienen el mismo valor.
-Este fenómeno tiene también que ver con los tiempos que corren, con la ausencia de censura.
-En mi país hace 30 años me hubiesen quemado en la hoguera, pero ahora las mujeres podemos escribir lo que se nos da la gana. Y fundamentalmente a mí me respalda mi familia.
-¿Qué opinás de Cincuenta sombras de Grey?
-Creo que James hizo una buena historia romántica, pero no entiendo ese sexo, aunque lo respeto, porque sé que hay mucha gente que lo practica. No hablaré mal de otra escritora porque sé lo que cuesta escribir un libro.
-A nivel mundial, ¿cómo explicás este fenómeno? ¿Tiene que ver con la soledad?
-Sí. Hay mucha gente sola, y que ha tenido malas experiencias y ya no se fía de nadie. Este tipo de novelas la hace soñar. Aunque también hay gente acompañada a la que le gusta este tipo de novelas.