Cómo es la transformación digital del turf argentino y qué genera la modernización de las apuestas

Candy Ride, Forli, Invasor, Bayakoa, Paseana, Campero, Blue Prize, Asiatic Boy, Didia, Full Serrano... Hay nombres propios que el turf argentino tiene como bandera por las hazañas que lograron en el mundo sosteniendo en la vidriera a la crianza nacional. Son caballos y yeguas estrellas, ejemplos entre los que marcaron hitos en la línea de tiempo en los hipódromos en distintos continentes.

Ahora, la hípica de nuestro país potencia su llegada al planeta a través de la modernización. Ya estaba la televisación, que permitió la expansión de las imágenes de las carreras desde la Argentina. Para cerrar el círculo con la era digital se suma lo tecnológico, con su capacidad de recepción y el derrame que tendría en la industria y sus trabajadores. Una deuda pendiente. La implementación de nuevas plataformas a nivel local surge para ponerse a la altura de lo que es moneda corriente fronteras afuera.

Palermo marcó el camino en el país en medio de la pandemia por el Covid, a través de un sistema que habilita a quienes tienen domicilio en la Ciudad. En algunas provincias se replicó la idea localmente. El turf bonaerense, a través del Instituto Provincial de Lotería y Casinos (IPLyC), se pliega a la captación de apuestas con una propuesta que consta de dos pasos: recibir juego en formato online bajo el sistema denominado “TeleTurf” y la habilitación de la modalidad reconocida como “Commingle”. A mayores ingresos, más beneficios para hacer más tentadoras las carreras para los aficionados, por los pozos que se acumulan, y para los propietarios y los equipos de trabajo de las caballerizas, ya que competirán por recompensas superiores, con costos que hoy se complican cubrirlos.

“Sabemos que los ingresos del turf se componen fundamentalmente por un 30 por ciento de la recaudación propia y por un 70 por ciento de lo que proviene del Fondo de Reparación [que es una Ley]. Con estas dos nuevas herramientas estamos buscando invertir esa ecuación económica, pero sin reducir el Fondo de Reparación, sino aumentando la masa de recursos. No se trata de achicar la actividad, como muchas veces se quiso hacer, sino fortalecerla”, asegura Gonzalo Atanasof, presidente del organismo que oficializó hace semanas la novedad junto al Ministro de Gobierno Carlos Bianco y al Asesor General de Gobierno Santiago Pérez Teruel.

Ya se dio un paso más con la reciente publicación en el Boletín Oficial relacionada al “Commingle”. La resolución Nº 597 autoriza a los hipódromos oficiales de ese territorio a implementar el sistema que permite exportar la señal y recibir directamente apuestas a su totalizador. La medida alcanza a San Isidro, La Plata, Tandil, Azul y Dolores, aunque podrán dispensarse solamente las carreras oficiales y con todos los controles reglamentarios.

“San Isidro trabajó mucho para esto, tiene todo listo desde lo técnico; sus carreras, sobre todo sobre pasto, son muy atractivas para el mundo. Lo sabemos porque nuestras imágenes ya llegan y gustan”, destaca Juan Mariano Villar Urquiza, recientemente reelecto presidente del Jockey Club.

Hay más exigencias: la calidad de la transmisión y el cumplimiento de los horarios, algo a lo que los otros cuatro escenarios deberán adecuarse. “En lo que se refiere a San Isidro, desde antes de publicarse en el boletín ya estábamos hablando con los que pueden ser los interesados. En casos, son empresas que manejan un grupo de clientes y unos pocos son directamente con otro hipódromo. Estamos trabajando en vender el producto. A medida que crezcan los pozos va a resultar más atractivo para los aficionados, va a darse un mayor interés; eso permitirá que no oscilen tanto los dividendos cuando se hace una apuesta grande”, explica Villar Urquiza. Latin American Racing Channel (LARC), por ejemplo, es una vía de llegada a diversos puntos de Europa, Estados Unidos y Asia. Es una significativa vidriera.

A mayores ingresos, más beneficios para todos. Pero hay paredes que derribar. “Las retenciones en la Argentina –un 28%– son altas, a diferencia de gran parte del planeta. De lo que ingrese al totalizador quedará ente un 8 y un 12 por ciento para distribuir en premios, en infraestructura y lo que son impuestos. Nuestra expectativa es ir creciendo para hacernos más tentadores con el correr de los meses, porque al principio puede llegar a ser el 10% de la recaudación”, menciona. Cuando eso suceda no sólo será más atractivo para el público, sino que aumentará el dinero que irá a las bolsas de premios, que es el principal ingreso de toda la cadena laboral: las comisiones para los jockeys, entrenadores, peones, vareadores, capataces y la gratificación para los propietarios. Y con el derrame sobre las decenas de oficios que están involucrados alrededor del caballo.

Para dimensionarlo, según datos del hipódromo de San Isidro, en el último Gran Premio Carlos Pellegrini se apostaron más de un millón de dólares en Hong Kong. Esos son ingresos que se perdió la Provincia de recaudar por no tener en funcionamiento este sistema de captación de apuestas. Antes, hubo cuatro intentos para llevar adelante esta implementación. “Estamos en una nueva etapa, de cara al futuro”, es el mensaje desde la Lotería bonaerense. Casi el 70% de los 6000 caballos de carrera que nacieron en 2024 en el país se crían en esa jurisdicción.

“El Commingle habilita a entrar en el proceso de negociación con los operadores internacionales, que son los que van a integrar los totalizadores de los hipódromos interesados en comprar las carreras. Esos proyectos de acuerdos comerciales van a ser evaluados y autorizados por el Instituto”, explica Atanasof. “En el caso de La Plata, hay otros desafíos como la actualización de la tecnología y la calidad de la imagen. También, respetar otros procesos istrativos que requiere el Estado. Está claro que esta iniciativa significa un incremento de la recaudación en premios para la actividad, para la provincia y para el municipio”, agrega.

Por el otro lado está la aplicación. Es un viejo anhelo del turf que está en la recta final. “Está terminada, pero falta la resolución. No es una página web, la gente va a tener que bajarla en el teléfono e inscribirse con sus datos, como si fuera una cuenta corriente. Inicialmente va a estar disponible para mayores de 18 años que tienen domicilio en la provincia de Buenos Aires, que en principio es una gran masa de público, y luego habrá que hacer convenios entre jurisdicciones, porque así funciona legalmente en la Argentina. Queríamos lanzarla para este 25 de mayo, pero no se llegó. Ahora, el deseo es que en julio esté operativa”, detalla Villar Urquiza, sabiendo que se dieron más pasos de los que faltan.

Es parte del proceso de modernización, de la necesidad de una mejora sustancial que demanda una industria que se encontró en desventaja ante la proliferación de los juegos de azar. El turf, se sabe, es un espectáculo deportivo y una actividad con gran inserción laboral en la que hay apuestas. Lo que está en juego, desde que quedó atrapado en limitaciones del pasado, son los puestos de trabajo. Es la carrera que necesita ganar.

Por Carlos Delfino

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