Acabo de matar a mi padre: la desgarradora historia detrás del documental furor en Netflix

Los documentales que dan cuenta de crímenes reales constituyen uno de los géneros que mayor fascinación producen en los s de Netflix.

Una de estas producciones se acaba de convertir en furor en la plataforma, ya que atrapa a los espectadores desde el mismo título, que expresa una frase real: Acabo de matar a mi padre. Se trata de una miniserie documental que en tan solo 3 episodios narra las circunstancias que llevaron al adolescente Anthony Template a asesinar a tiros a su progenitor, un crimen que reveló, en las investigaciones posteriores, la violenta historia de un padre abusivo y maltratador.

En la madrugada del 3 de junio de 2019, Anthony Template, de 17 años, le disparó a su padre, Burt Template, en su casa de un barrio residencial de la ciudad de Baton Rouge, en Lousiana, Estados Unidos.

El propio joven, luego de dejar malherido a su papá, llamó al 911 y confesó: “Acabo de matar a mi padre”. El adolescente añadió que lo hizo tras una serie de discusiones, que lo llevaron a tomar el arma y descerrajar tres tiros contra su progenitor. Si bien el hombre no murió en ese momento, no tardó demasiado en hacerlo.

Este dramático llamado a emergencias es el que da origen al documental Acabo de matar a mi padre, que puede verse en Netflix desde el pasado 9 de agosto y que parece haber subyugado a los fanáticos de este tipo de producciones que tratan crímenes reales.

La docie cuenta con los testimonios del propio Anthony, de su madre, y de otras personas relacionadas con el entorno del joven y con quienes participaron en el juicio posterior al que fue sometido el adolescente.

Además, esta realización de no-ficción lleva la firma de Skye Borgman, la directora que hace poco presentó otra producción que causó fuerte impacto en Netflix: La niña de la foto. Al igual que Acabo de matar a mi padre, aquel documental también tenía como eje un caso policial real que escondía detrás de sí un desgarradora historia de abusos y maltratos.

En Acabo de matar a mi padre, el crimen de Burt Template sirvió como una trágica manera de revelar las situaciones de constante maltrato y conductas abusivas que sufría Anthony por parte de su papá. Así, a través de distintos testimonios y de las circunstancias del juicio, la serie parece invertir los roles de la víctima y el victimario al conocerse comportamientos verdaderamente monstruosos del hombre asesinado hacia su hijo.

Poco a poco, el documental narra que Burt no solo era violento con el pequeño Anthony, sino también con su madre, y que prácticamente le quitó al menor a su mamá como una manera de dañarla, y tenía al muchacho prácticamente secuestrado y controlado. A punto tal, que el pequeño Anthony nunca fue a la escuela, y su padre lo monitoreaba constantemente con cámaras que había instalado en su casa, y le revisaba también lo que su hijo escribía en su teléfono.

Desde el asesinato a balazos de Anthony a su padre hasta la definición del juicio contra el muchacho, la realización de Borgman va construyendo un relato que se interna en las luces y sombras de las relaciones humanas, con profundidad y un ritmo que apasiona y estremece a los espectadores por igual. Es que en este caso, al igual que en otras tantas y tristes ocasiones, la realidad superó a la ficción.

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