Chadwick Boseman: una muerte prematura que plantea desafíos en el mundo de Marvel
LA NACIONMarcelo Stiletano
Es tan fuerte la conmoción que todavía provoca en el mundo el prematuro adiós de Chadwick Boseman que las preguntas sobre el vacío inmenso que se abre a partir de su inesperada muerte tardarán muchísimo en contestarse. Y hasta es probable que algunas de ellas no encuentren nunca una respuesta.
Boseman murió el 28 de agosto con apenas 43 años. No se recuerda desde la repentina desaparición de Heath Ledger un impacto parecido en todo el universo que gira y se mueve alrededor del entretenimiento y la cultura pop. Pero lo que ocurre con Boseman es todavía más profundo. Ledger murió en 2008, a los 28 años, antes de que se revelara su colosal aparición como el Guasón. Su desaparición fue anterior a lo que todos comprobaron más tarde: ese papel podía ser el anticipo de todo lo que llegaría después y la tragedia más inexplicable dejó trunco.
Con Boseman ocurre todo lo contrario. Como Ledger, nos dejó en la plenitud de su potencial como actor y estrella de cine, pero en este caso con un poderoso legado ya construido a sus espaldas. Y a la vez con la sensación muy palpable de que esa impronta se correspondía a la perfección con este tiempo y este lugar. Más allá de algunas proclamas y consignas que puedan sonar efectistas, resulta indiscutible el ascendiente de Boseman entre un público multitudinario que se reconoce cada vez más en su identidad y recurre a símbolos de la cultura pop para seguir construyéndola.
De la mano de Pantera Negra, un personaje central en el Universo Cinematográfico de Marvel (MCU), Boseman llevó desde la geografía ficticia de Wakanda la afirmación de la mirada y las tradiciones afroamericanas al territorio de los superhéroes contemporáneos. Toda la carrera previa de Boseman en el cine ahora puede verse en retrospectiva como un camino casi natural hacia ese destino de heredero de un reino de fantasía fundado en principios muy elocuentes y fáciles de encontrar en el mundo de hoy.
Apenas conocida la noticia de la muerte de Boseman, el hombre fuerte de Marvel, el productor Kevin Feige, reveló que su nombre era el único que el estudio tenía en cuenta para interpretar a Pantera Negra. Nadie pensaba en un plan B. Lo que Marvel vio fue un actor que venía representando en el cine a varias figuras esenciales y representativas del Olimpo afroamericano. Luchadores de la reivindicación de la raza negra en distintos momentos de la historia del siglo XX en los Estados Unidos, en medio de omisiones, discriminaciones, marginación y racismo explícito.
Empezó con Jackie Robinson, el primer beisbolista afroamericano que jugó en las ligas mayores. Siguió con James Brown, el poderoso e inolvidable Padrino del Soul. Y sumó después a Thurgood Marshall, primer magistrado de raza negra incorporado a la Corte Suprema de Justicia de Estados Unidos. Después de llevar a esos tres pioneros de su raza a la pantalla, Boseman aparecía casi por decantación como el que inauguraría ese mismo punto de referencia en la poderosa maquinaria de Marvel. El dueño natural de un personaje que podía liderar la producción más cargada de compromiso político de toda la historia del estudio: T’Challa, el príncipe heredero del reino de Wakanda. Y desde allí, Pantera Negra, la expresión afroamericana de los Avengers.
Tenía ascendiente, personalidad, carisma y una presencia escénica de gran autoridad, pese a ser muy joven, para adaptarse sin problemas al nuevo desafío. Tanto lo consiguió que algunos empiezan tímidamente a hacerse la pregunta inevitable: cuál será el futuro de Pantera Negra después del período de luto que todavía está lejos de apagarse.
Si Boseman hubiese sido un astro del fútbol ya se habría escuchado un primer veredicto. Tras el retiro de un ídolo indiscutido hay casos en los que el club (o un equipo nacional) retira esa camiseta como máximo reconocimiento. Nadie estaría en condiciones de allí en delante de lucir en la espalda el mismo número de una figura que jamás llegará a superarse. Es lo que dicen algunos frente a los planes futuros diagramados hace ya un buen tiempo por Marvel con la meticulosidad conocida. Pantera Negra 2 aparece en la grilla del estudio con estreno planeado para mayo de 2022. Y nadie imaginaba hasta el 28 de agosto que Boseman no iba a estar para ese nuevo desafío. De hecho, en los últimos días trascendió que una de las razones por las cuales el actor mantuvo hasta el final en secreto su estado de salud fue la esperanza de que iba a poder superar el cáncer que lo aquejaba y retomar el proyecto.
La reacción inmediata parece unánime, tal como lo cuenta una reciente nota del diario The Guardian. Grupos de fans incondicionales y algunos expertos coinciden en que Boseman es irremplazable y que habría que hacer cirugía mayor. No queda otra opción desde esta perspectiva que cancelar definitivamente el proyecto de Pantera Negra 2. Sin embargo, aparecen también con rapidez los atenuantes. Muchos recordaron que Marvel ya logró con éxito algunos cambios de nombre en papeles importantes. Mark Ruffalo se convirtió en el Hulk definitivo e hizo que nadie se acordara de Edward Norton. También Don Cheadle se ganó sin problemas el lugar de Terrence Howard como War Machine. Pero despedir al gran héroe afroamericano puede ser muy complicado para Marvel. La mística creada alrededor del personaje, de su entorno y de su influencia hacia afuera es enorme. Clave, según cuentan los expertos, para la configuración de la nueva etapa del MCU y con un efecto actual y futuro indiscutible en las boleterías.
En la nota de The Guardian se arriesga una temprana opción que podría resultar plausible. Mantener la llama simbólica de T’Challa como bandera de Wakanda en futuras aventuras y hacer que ese espíritu se encarne en su hermana Shuri, interpretada en las películas de Marvel por la actriz británica Letitia Wright. Algunos piensan que esa posta inclusive enriquecería un plantel de grandes heroínas que Marvel se dedicó a cuidar y fortalecer en los últimos años.
De esa manera, además, el estudio conservaría la fortísima conexión que el estudio estableció desde Pantera Negra (y especialmente gracias al trabajo de Boseman) con el mundo cultural afroamericano. Wright nació en Georgetown (Guyana) de una familia de procedencia ghanesa y se instaló en Londres con su familia desde muy chica. Tiene a primera vista todas las condiciones para convertirse en la heredera.
No será fácil, sin embargo, llegar a una conclusión de ese tipo en poco tiempo. La presencia de Boseman es lo suficientemente fuerte como para imaginar cambios en un futuro inmediato. Pronto veremos cuáles son las urgencias de Marvel. Las decisiones no serán fáciles porque el estudio afronta hoy una pérdida de valor incalculable. Aunque haya sido protagonista de una historia de fantasía, Boseman será recordado en todo el mundo como un héroe invencible. Y por más que una enfermedad cruel se lo haya llevado demasiado pronto, resulta muy difícil despedirse de alguien que siempre resultó victorioso. Como dijo su familia al despedirlo, Chadwick Boseman fue un verdadero peleador.
CHADWICK BOSEMAN EN STREAMING
La aparición póstuma de Boseman en el cine llegará en algún momento de este año a través de Netflix, cuando se estreneMa Rainey’s Black Bottom, dirigida por George C. Wolfe (Noches de tormenta) y coprotagonizada por Viola Davis.
Ahora es posible recorrer buena parte de su filmografía más importante en streaming, con la excepción de 42, la historia del beisbolista Jackie Robinson, y de I Feel Good, el biopic sobre James Brown, que no aparecen en los catálogos locales de ninguna plataforma.
Los otros títulos están disponibles del siguiente modo:
- Decisión final (Draft Day, 2014), de Ivan Reitman, disponible en Flow.
- Capitán América: Civil War (2016), de Anthony y Joe Russo, disponible en Netflix.
- King, una historia de venganza (Message from the King, 2016), de Fabrice Du Welz. Disponible en Netflix.
- Marshall (2017), de Reginald Hudlin. Disponible en Flow.
- Pantera Negra (Black Panther, 2018), de Ryan Coogler. Disponible en Movistar Play.
- Avengers: Endgame (2019), de Anthony y Joe Russo. Disponible en Amazon Prime Video y Movistar Play.
- Manhattan sin salida (21 Bridges, 2019), de Brian Kirk. Disponible en Amazon Prime Video. Se estrenó en los cines argentinos como Nueva York sin salida.
- 5 sangres (Da 5 Bloods, 2020), de Spike Lee. Disponible en Netflix.
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