Cortes de luz: claves para evitar que los picos de electricidad arruinen los electrodomésticos
Frente al posible panorama de un verano con interrupciones frecuentes del servicio eléctrico, es importante tomar ciertas medidas claves en el hogar para prolongar la vida útil de los dispositivos
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La experiencia de registrar el instante exacto en el que se corta la electricidad suele ser demoledora para el estado de ánimo. Si es de día, implica abandonar casi todas las tareas cotidianas que nos ocupan la jornada y, si nos encuentra de noche, supone la incertidumbre de la oscuridad total junto con un descanso escaso debido a la expectativa de que, en cualquier momento, pueda regresar.
A esta escena hay que sumarle la preocupación por cuidar y proteger los numerosos electrodomésticos del hogar, que dependen de la energía eléctrica para funcionar. Por eso, frente a un horizonte que nos presenta una posible temporada de cortes de luz frecuentes, resulta crucial seguir una serie de consejos prácticos para minimizar los riesgos y preservar los dispositivos durante un apagón.

En primer lugar, en vez de quedarnos paralizados frente a la situación, debemos desconectar con rapidez todos los electrodomésticos de la casa, especialmente aquellos que estaban en uso durante el corte repentino. Desde computadoras hasta heladeras, pasando por televisores, lavarropas, cafeteras y otros equipos electrónicos: todos pueden sufrir daños debido a los picos de alto voltaje causados cuando se restablece la energía. El retorno de la electricidad puede provocar fluctuaciones en la corriente, que son perjudiciales para los dispositivos conectados. De esta manera, contribuimos a extender su vida útil.
A su vez, es importante también apagar todos los interruptores de luz y lámparas para que no sean afectados por la intensidad de la corriente. Conviene dejar uno encendido para saber cuándo regresa la energía.
Como una medida mayor de prevención, se aconseja el uso de protectores contra sobretensiones. Estos dispositivos están diseñados para absorber y disipar los picos de voltaje que se producen cuando vuelve la energía y, de esta manera, funcionan como una barrera de protección de los electrodomésticos conectados.
Estos son considerados útiles en los casos en los que no hay nadie en la casa para ocuparse de los artefactos que normalmente se dejan enchufados, como la heladera y el aire acondicionado. Se trata de una inversión inteligente para prolongar la vida útil de los aparatos electrónicos. En esos casos, conviene elegir unos que cubran toda la casa.
Una vez que haya regresado la electricidad, se deben esperar entre cinco y diez minutos para comenzar a conectar de forma gradual los dispositivos. Es el tiempo que tarda la energía en estabilizarse y así se evita que vuelva con un voltaje mayor que puede dañar los equipos. Distribuir la corriente contribuye a la eficiencia energética y prolonga el rendimiento de los electrodomésticos.
Si el corte sucede de noche, es preferible utilizar linternas en lugar de velas para iluminar el espacio. Las velas presentan riesgos de seguridad que mejor evitar en estas situaciones. Por otro lado, las linternas de nueva generación son eficientes en energía y proporcionan una luz adecuada para el hogar durante el período de oscuridad que implique la interrupción del servicio.
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