El triunfo en la ciudad disipó la interna libertaria entre Karina Milei y Santiago Caputo

Un almuerzo ligero reunió este lunes en la Casa Rosada a buena parte de la mesa política que estuvo detrás de la estrategia electoral que consagró a Manuel Adorni como el gran ganador de las elecciones legislativas porteñas, representando a La Libertad Avanza. El encuentro buscó dejar atrás los cortocircuitos entre la tropa de Karina Milei, que se encarga del armado territorial del oficialismo, y de Santiago Caputo, que diseña la estrategia libertaria.

Del almuerzo, en uno de los despachos del Salón Martín Fierro, participaron el propio Adorni, la secretaria general de Presidencia, el asesor presidencial, la legisladora porteña Pilar Ramírez y el subsecretario de Comunicación, Javier Lanari, entre otros.

Se trata de parte de la mesa política que trabajó en la estrategia para la campaña libertaria en la ciudad, en lo que terminó siendo el triunfo del portavoz. La lista violeta no solo terminó ganándole al peronismo que impulsaba al diputado nacional Leandro Santoro, que parecía primero en la mayoría de las encuestas, y sino que doblegó en votos a Pro en su bastión, al que relegaron al tercer lugar.

El análisis de esos resultados fue motivo de conversación, entre empanadas de carne y gaseosas, en el almuerzo del que también participaron Aimé “Meme” Vázquez, jefa de Gabinete y mano derecha de Adorni; Macarena Alifraco, funcionaria central en las filas de Caputo, y Nicolás Pagojks, tercer candidato en la lista.

La idea de reunirse este lunes surgió en la noche del domingo, en medio de los festejos. El grupo venía realizando encuentros por la campaña todos los lunes y jueves. Decidieron que esta vez repetirían, pero para festejar. “Sobraban los motivos”, dijeron en el marco de un escenario electoral en Ciudad en el que los libertarios consideran que les salieron “todas”: le ganaron a Santoro; noquearon a Pro y no renovará su banca en la Legislatura Ramiro Marra, echado de las filas libertarias por Karina Milei bajo el argumento de que convalidó una suba de impuestos propuesta por el jefe de gobierno, Jorge Macri.

El triunfo libertario con Adorni a la cabeza pareció dejar atrás las diferencias que a comienzos de este mes se hicieron públicas entre el sector que responde a Karina Milei, con Sebastián Pareja como armador en la provincia, y el asesor presidencial.

Pareja estuvo en Casa Rosada, donde primero se reunió con Eduardo “Lule” Menem, de las filas de Karina Milei y con quien trabaja en el armado en provincia de Buenos Aires. Luego, se encontró con la hermana del Presidente, en momentos en que se acercan las definiciones sobre lo que sucederá en territorio bonaerense.

Cerca de las filas de Caputo juran que no tiene diferencias con Karina Milei y que solo tienen “roles distintos, nada más”. En cuanto al armado territorial, aseguran que no tiene nada que ver con él y que su responsabilidad es “proteger la identidad del espacio y ganar elecciones”.

Karina Milei es considerada en las filas libertarias como la ideóloga de la estrategia que utilizó el oficialismo para afrontar la campaña porteña, porque fue quien eligió a Adorni como candidato. Pero, además, le adjudican también la definición del escenario previo a la elección: en esa lista de definiciones incluyen “no aprobar el presupuesto porteño, enfrentar a Jorge Macri y entender que Pro se estaba licuando”. También, “la confianza en los actores involucrados, a los que dejó a hacer”.

“Karina y Santiago no estuvieron mal entre ellos. Pudo haber diferencias entre lo que pasa por debajo de ellos, pero eso es otra situación”, dicen cerca de la funcionaria, minimizando disputas detonaron en público, como las denuncias que involucraron a funcionarios de PAMI. “Al final del día hay una líder que es Karina”, dicen en la Casa Rosada. “Hay una línea y un liderazgo que después de lo del domingo no hay ninguna duda. Un aval total”, completan.

En otras instancias de este año electoral, donde La Libertad Avanza fue derrotada o se aferró a victorias magras, como sucedió en los comicios de Santa Fe, por ejemplo, en la pelea porteña hubo sinergia entre Karina Milei y Santiago Caputo.

El triunfo por casi tres puntos sobre Leandro Santoro y prácticamente el doble de votos logrados frente a Pro hizo que ahora los integrantes del “triángulo de hierro” busquen repetir la fórmula.

“Equipo que gana no se toca”. La frase del universo futbolero fue usada por el corazón libertario en las horas posteriores a la contienda electoral en la ciudad de Buenos Aires para explicar lo que podría suceder en territorio bonaerense, donde el 7 de septiembre habrá elecciones desdobladas.

En ese sentido, y en sintonía con los dichos de Javier Milei, en las filas de la secretaria general de la Presidencia y de Caputo abren las puertas a que se sumen dirigentes amarillos a sus filas. Luego de que el Presidente definiera este lunes al partido amarillo como algo “obsoleto”, en Balcarce 50 buscan revalorizan a Pro. “El partido es más que Mauricio Macri”, distinguen.

En el Gobierno se ilusionaban con llegar rápidamente a un acuerdo a través de la figura de Cristian Ritondo, de enorme sintonía con el oficialismo, y que es además el presidente de Pro bonaerense. Suman a eso que la derrota del oficialismo porteño no solo prueba que la postura crítica a la istración libertaria no es aprobada por el votante de Pro, por lo que empodera a Ritondo en la negociación con los alfiles libertarios, que podría comenzar a retomarse en breve.

Por Cecilia Devanna

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• Karina Milei

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