Javier Milei retomó su agenda con una visita internacional y prepara su defensa por el escándalo con las criptomonedas
El Presidente recibió a un senador republicano antes de su nueva visita a Estados Unidos; hubo una reunión entre Luis y Santiago Caputo y desde el Gobierno buscan relativizar la crisis por la presunta megaestafa
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LA NACIONCecilia Devanna
Javier Milei llegó minutos antes de las 10 de este lunes a la Casa Rosada. La última vez que había estado en el edificio fue el jueves, cuando tuvo varias reuniones, entre ellas una de Gabinete casi en pleno. Esa jornada en la que se celebró la media sanción de ficha limpia en Diputados terminó siendo la antesala de lo que pasó el viernes, cuando comenzó el mayor escándalo desde que comenzó la gestión libertaria. Ese día el mandatario trabajó desde Olivos, donde sumó reuniones y a las 19.01, cuando caía la tarde, impulsó desde su cuenta de la red social X el proyecto de criptomonedas que movió US$4000 millones en pocas horas y derivó en un escándalo político y causas judiciales en la Argentina y Estados Unidos por una presunta megaestafa.
En la Casa Rosada insistieron hoy en relativizar el escándalo con las criptomonedas y afirmaron que el “perjudicado” fue el propio mandatario. “Promocionó el proyecto, pero no la moneda. Todavía no hay estafa, porque los fondos están”, argumentaron fuentes oficiales.
Desde la sede de Gobierno aseguraron que “no va a rodar ninguna cabeza” y que “si llegara a haber algún culpable, ese será algún empresario”. Por estas horas toda la atención se la está llevando el nombre de Mauricio Novelli, la “pata local” de la empresa acusada y con quien Milei tuvo varios encuentros y una relación previa a su asunción como mandatario. En el correr de las tarde de este lunes corrían las posibilidades de una eventual denuncia a Novelli desde las filas oficiales.
En materia de derecho, quien estuvo este lunes en Casa Rosada fue el secretario de Justicia, Sebastián Amerio, hombre de Santiago Caputo, y fuente de confianza en materia jurídica. La línea de Gobierno es que, en lo que tiene que ver con el presidente, “no hubo delito” e insistían en que “fue el más perjudicado por lo que sucedió”.
Desde el Gobierno buscaron despegar el nombre de la secretaria general de la Presidencia y hermana del presidente, Karina Milei. “No tiene nada que ver con esto”, dijeron tajantes y agregaron que las acusaciones hacia ella fueron “operaciones”. Las miradas, como sucede en general, apuntaron hacia las filas macristas. En tren de operaciones, en Balcarce 50 también apuntaron a que el comunicado de Pro, que salió con respaldos y señalamientos al entorno del mandatario, “fue más de los primos [por Mauricio y Jorge Macri] que de Pro”.
De acuerdo a registros oficiales, Karina Milei funcionó como una de las puertas de entrada de los expertos cripto vinculados a $LIBRA. El otro nexo fue Novelli, quien el 8 de enero de 2024 visitó a la funcionaria y desde entonces entró al menos nueve veces a la Casa Rosada y otras tres a la Quinta de Olivos, según documentos oficiales. Este experto en criptomonedas acercó al Poder Ejecutivo a los empresarios vinculados al polémico meme coin, como el CEO de la compañía que promocionó al token, Julian Peh, y Hayden Mark Davis. “Karina no tiene nada que ver con eso”, insistían en la propia Casa Rosada.
En Casa Rosada, pese a la voluntad de amortiguar el impacto de lo sucedido, itían que había que “empezar a cuidar más quienes se acercan” y aseguraban: “estas cosas no pueden volver a pasar”.
El inicio del escándalo
Milei posteó el viernes a las 19.01 en la red social X sobre un proyecto privado que fondeaba, en los supuestos, a pequeñas empresas. Pero lo acompañaba de un link y una sigla $LIBRA, un extraño token cuyo circulante era controlado en un 82% por como máximo cinco billeteras digitales. Esa fue la primera advertencia. Al estar centralizado, su valor se podría ir a cero rápidamente, la primera alerta sobre el tema.
El dominio del sitio vivalalibertadproject.com era del mismo día, y que la moneda que se promocionaba había sido creada tres minutos antes del posteo presidencial, lo que fue una segunda alerta. En esos frenéticos minutos la capitalización bursátil de $LIBRA trepó a los US$4500 millones, pero se trata de un valor relativo ya que lo que importa es la liquidez. En ese momento llegó a ofrecerse a cinco dólares cada token y luego se desplomó a veinte centavos. Todo lo que ahora será materia de investigación judicial. En el Gobierno esperan los avances.
Este lunes, apenas desembarcó en el palacio de Gobierno, el jefe de Estado se dirigió a su despacho del primer piso, en el que poco después recibió al senador republicano de los Estados Unidos Steve Daines, acompañado de una comitiva. El encuentro sirvió como la antesala de la gira que encarará este jueves rumbo a Washignton. A diferencia de las ocho visitas anteriores, esta llegada estará teñida de la polémica por lo sucedido con el escándalo de las criptomonedas.
Milei viaja para presentarse en la nueva cumbre de la Conferencia Política de Acción Conservadora (AC), donde se verá con su par estadounidense, Donald Trump y el magnate, Elon Musk.
La presencia de Daines estuvo precedida por una alusión a Estados Unidos, desde el entorno del mandatario. En los pasillos de Balcarce 50 se resaltaba este lunes que en ese país es feriado y por eso no abrieron los mercados.
En paralelo a la reunión de Milei con Daines, estuvo en Casa Rosada, el titular de Economía, Luis “Toto” Caputo, quien se reunió con su sobrino y principal asesor presidencial, Santiago Caputo. En una reunión que se extendió por alrededor de dos horas. Cuando promediaba la tarde, el responsable de Hacienda volvió a Balcarce 50 y se retiró poco después.
Mientras Milei pasaba las primeras horas de su jornada laboral en su despacho y se preparaba para dar una entrevista, que se transmitirá a las 20, fuentes cercanas buscaban bajar el tenor de lo sucedido y aseguraron que “el único en la faz de la tierra” que pudo ser engañado por lo que sucedió fue el propio mandatario. Y que esperan que “la Justicia se pronuncie sobre el tema”, en referencia a las denuncias presentadas y que se concentraron en manos de la juez María Servini y el fiscal Eduardo Taiano, de los tribunales federales de Comodoro Py.
Por lo pronto, en la Casa Rosada se mostraron convencidos de “que no hay delito”. En el país, la jueza federal María Servini estará a cargo de uno de los expedientes. En Estados Unidos, la presunta megaestafa digital $LIBRA llegó a las autoridades locales. El Departamento de Justicia y la Oficina Federal de Investigaciones (FBI) recibió al menos una denuncia criminal contra los protagonistas del fraude masivo, que generó ganancias ilícitas entre 80 y 100 millones de dólares.
El llamado “reporte de operaciones criminales” apuntó tanto a Milei, como a los roles que asumieron el estadounidense Hayden Mark Davis, el singapurense Julian Peh y los “empresarios” argentinos Mauricio Novelli y Manuel Terranos Godoy, de origen español.
La denuncia la radicó un estudio jurídico argentino especializado en casos de insolvencia internacional y fraudes financieros, Moyano & Asociados, que también notificó a la Comisión de Valores estadounidense (SEC, por sus siglas en inglés) sobre las maniobras delictivas registradas desde la noche del viernes.
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